De revelación a “maestros”
Nunca habían podido contra los número 1, alguna vez estuvieron cerca, pero que mejor sitio que la final del Master para vencer a Juan Martín Díaz y Fernando Belasteguin. Una más que merecida victoria de Sanyo y Maxi para cerrar un año espectacular de los chicos de San Luis.
Aunque el partido se haya visto truncado por el abandono de Bela nada más acabar el tercer set, por lo hecho hasta ese momento por los “puntanos” el triunfo es más que justo. Cayeron en el tie break del primer set, pero en el segundo sacudieron a los “reyes” en la pista con un categórico 6/1.
Jugaron a un nivel altísimo, como lo han venido haciendo en los últimos torneos, con un Máxi Sánchez muy sólido y que a nuestro entender se convirtió en el jugador del Master. El de Villa Mercedes superó todas esas inseguridades que le vimos al inicio de temporada y cuando se soltó mostró todas sus cualidades, porque quedó claor que no solo es bueno su smash.
Break al servicio de Juan Martin e inmediato “warning” a Bela. Así comenzó la final, mostrando el enfado del de Pehuajó, contrariado por el inicio pero soltando también la bronca interna por esa fascitis plantar que desde hace algunos meses le impide estar al 100%.
No tardó en llegar la recuperación de los número 1, fue en el cuarto juego, tras ir 40-0 abajo recuperaron y rompieron el saque de Sánchez. Todo estaba igualado como al comienzo y así siguió hasta la definición en el tie break.
Lo del segundo set fue para enmarcar. Solo 14 puntos de Juan y Bela ante una auténtica avalancha de los campeones que rompieron dos veces el saque de Juan Martín.
Nuevamente la paridad en el tercero. Tras el break al saque de Juan Martín en el quinto juego, llegó el contrabreak en el sexto al servicio de Sanyo. Los número 1 tuvieron una gran oportunidad en el decimosegundo juego, donde desaprovecharon una bola de set y luego llegó el tie break, donde Sanyo y Maxi lo dieron todo, terminando por destruir a los “reyes”.
Bela levantó su mano, dijo no va más, Sanyo y Maxi se miraron, saludaron a sus rivales y luego se fundieron en un abrazo interminable. Un cierre espectacular de los “amigos” que se juntaron este año por eso, por ser “amigos” y la apuesta no les pudo salir mejor.
Escrito por: Oscar Solé
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